libro
Y me dijo:
“La perfección es una palabra que puedes poner antes o después de saltar.
Si la pones antes, harás que los demás sean felices.
Si la pones después, te harás feliz a ti y a quienes amen tu corazón”.
Lo único perfecto es lo que se comparte.
Si para mí, ser creativo es despuntar frente a los demás, hacer que el grupo me diga lo maravilloso que soy y que todos se asombren con mis habilidades, entonces estaré preguntando, en esencia, otra cosa. Estaré preguntándome cómo ser increíble frente a los demás usando mi ingenio, pero no cómo ser creativo.
Pueden ser cometas, pueden ser anclas, pueden ser palabras que nos eleven o palabras esclavistas. Las palabras tienen memoria y no son arbitrarias ni tampoco inocentes. “No hay palabras neutras” decía mi compatriota Galeano, siempre están mirando a algún lugar. Es menester saber si el lugar al que miran nos suma o nos resta vida.